Representantes de importantes
organizaciones sociales que cumplen una función asistencial en sus territorios
y miembros de la Iglesia reclamaron unidos por la Asignación Universal por
Hijo: un bono para los beneficiarios por cada hijo y no por grupo familiar,
como anunció el Gobierno. Además, actualizar los ingresos para las
cooperativas, un aguinaldo en los planes sociales y la sanción de la ley de
Emergencia Social.
“No nos obliguen a ir a los
hipermercados”, advirtió Daniel Menéndez, líder de Barrios de Pie, en el
despacho de la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley. El momento de
tención pasó rápidamente para suerte de la funcionaria que prometió una respuesta
a la brevedad. Sin embargo, desde las agrupaciones aseguran que “se perdió
mucho tiempo”.
En la cita, que se llevó a cabo en
el piso 14 del ministerio, participaron Fredy Mariño, de la Corriente Clasista
Combativa; Esteban Castro, de la Confederación de Trabajadores de la Economía
Popular (CTEP); Emilio Pérsico, del Movimiento Evita y Sergio Sánchez; de
Trabajadores Excluidos (MTE); entre otros.
Stanley se mostró de acuerdo con
el pedido pero argumenta que excede a su presupuesto. De todas formas, “trasladaré
la inquietud al Presidente”, afirmó. La ministra volverá a sentarse con los
referentes de las organizaciones en la segunda semana de noviembre, luego
de que éstos participen de una reunión en el Vaticano con el Papa.
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